domingo, 4 de marzo de 2012
NOCHE EN UN BAR
LA FUERZA DE LA QUÍMICA…
Era una noche tranquila pero hermosa, nada fuera de lo común, rumba, luces, jóvenes y adultos buscando un poco de diversión en un reconocido sitio de la ciudad, una decoración muy deportiva, con estilo y ambiente internacional, un menú exquisito y licores exclusivos.
Ahí estaba aquella pareja la cual visitaba cada ocho días este lugar, ya eran conocidos en el, ella Carolina, una mujer de 39 años de edad pero con físico y espíritu de una joven, era muy amiga de uno de los dueños de este lugar el cual sabia toda su historia, sus más íntimos secretos y él, un joven de 22 años terminando apenas su carrera profesional y con toda su vida por delante.
Estos 2 personajes eran pareja, pero no cualquier pareja, Carolina es una señora en proceso de divorcio, con hijos y un nivel socioeconómico alto y él quien la acompaña es solo un jovencito que en la sociedad de hoy en día tranquilamente podría ser su hijo, pero esta relación va más allá. Se conocieron en este mismo lugar un día cualquiera viendo un partido de talla internacional, cada cual estaba en mesas distintas con sus respectivos familiares y amigos, cruzaron unas cuantas miradas y la química hizo de las suyas.
Se conocieron y ambos tenían muy claro que solo querían pasar momentos de placer juntos, pero con el pasar de los días y los meses se envolvían más y más en ese “juego” de placer y de mentiras, ya que cuando se conocieron, en ese entonces Carolina aún era una mujer casada, se comenzaron a involucrar sentimientos y ahí se dieron cuenta de que lo que había empezado como una diversión se les había salido de las manos para convertirse en amor.
Carolina tomó la decisión de divorciarse y empezar una relación estable con este joven, ya llevan varios meses de compartir juntos y enamorados, ellos nunca pensaron que esa noche cualquiera en el cual cada uno tenía su vida y su camino, iba a ser el comienzo de un gran amor en el cual la edad y la sociedad no tienen importancia.
PAULINA BUILES HERNÁNDEZ
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Buena historia pero faltó la descripción del lugar
ResponderEliminar