Solitario, apartado de los bloques de la universidad, con nombre de campamento. Subí unas 1o escaleras estrechas y llegué a una calle no tan concurrida ni por carros, ni por gente. Al frente hay un camino de cemente que cumple el papel de una especie de puente, a sus lados hay zona verde. Al atravesar el camino hay un kiosko rojo, en el se encuentran ubicadas 9 mesas de 4 sillas cada una y al final una barra roja de la cual el asiento es el muro que rodea el kiosko. una pequeña tienda, pero con de todo para vender, no se como hacen perros en ese lugar tan pequeño, que por cierto son deliciosos.
Siguiendo el recorrido hay una cancha, es superficial , sintética, enmallada, más que cuidada, solo se ingresa a ella con una reservación previa. Al lado izquierdo de la esta cancha hay una multicancha de cemento, pues esta adaptada para jugar fútbol, basquetbol y voleybol. antes era descubierta, pero ahora la cubre un gran techo rojo el cual en la parte de arriba forma un triángulo, el techo fue trasladado hace unos años desde el liceo de la universidad, el cual quedaba en Buenos Aires, Ayacucho.
Al lado derecho de la cancha sintética, hay una montaña (donde estoy sentada) llena de zonas verdes, hojas que caen de los árboles que hay detrás de mí y que logran hacer sombra que no deja que entre el sol.
Más arriba hay otra cancha de arenilla, es grandísima y anchísima, tanto que alcanza a ser más grande que la sintética y la multicancha juntas. Al lado izquierdo de esta cancha hay un kiosko aparentemente abandonado, es hecho de ladrillo y de colo rojo en sus puertas y ventanas. Aún más adelante hay una calle, al lado derecho de esa calle hay dos canchas de tenis, una más arriba que la otra, son de cemento y enmalladas, esas dos canchas casi nunca son utilizadas.
La última parte del lugar y que también es el extremo de la universidad, los límites, es una manga en la que a veces los trabajadores van en una camioneta que atraviesa la cancha de arenilla. Ví que llevaban troncos y ramas en la parte de atrás de la camioneta.
Camila Sánchez
que buena descripción
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