lunes, 20 de febrero de 2012


VIAJE AL SEXO:

Todo comenzó una tarde de invierno, cuando conocí a Frank, un hombre alto, con un cuerpo atlético que cualquiera envidiaría, sonrisa angelical, labios carnosos rosados y una cara de dios que parece que se hubiera escapado del Olimpo.
Comenzamos a hablar como si nos conociéramos de toda la vida, palabras iban y venían, cuando de repente Frank comenzó a acariciarme las piernas, mi corazón se puso a mil; fue más lo que me demoré en reaccionar de lo que estaba sucediendo, que Frank en besarme locamente por todo mi cuerpo.
Todo fue muy rápido, yo estaba en un trance muy excitante, no alcanzaba a entender lo que estaba sucediendo, el hecho era que estábamos teniendo relaciones como nunca nadie en mi vida lo había hecho. En la calle, a la luz de todas las personas que caminaban por el lugar.
Para mí, fue algo mágico, nunca esperado ni imaginado; pero fue lo mejor que he experimentado en mi vida.
En cuanto a Frank no volví a saber nada de él, pero eso sí, nunca, pero nunca lo olvidaré, por qué fue el único viaje al sexo que he tenido en todos mis años de existencia.

ANTONELLA BOUCKENOOGHE J.

1 comentario:

  1. Agitado como el recuerdo, el detalle de la calle queda inconcluso..falta más, envolver la historia en imaginarios, y construir otras opsiones

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